Don K promete ponerse al frente del PJ

Como verán este articulo muestra una decisión, acertada por demás, de Don K que en la entrada que sigue a esta motivo el inicio de una serie de tres artículos acerca de como fue reorganizado en el pasado el PJ, de como esta hoy y de como debiera ser la reorganizacion del PJ que encabece Don K.

Kirchner prometió liderar la reorganización del justicialismo

Lo afirmó en Ituzaingó ante 30 intendentes del conurbano; críticas a Rodríguez Saá Jueves 25 de octubre de 2007 Publicado en la Edición impresa

El fin de la campaña encontró al presidente Néstor Kirchner en busca del voto peronista. Después de la rispidez que generó en los intendentes del conurbano bonaerense el armado de las listas de candidatos con mucha presencia de radicales, el Presidente salió a garantizar que se hará cargo de reorganizar el Partido Justicialista. Algo similar prometió el ex presidente Eduardo Duhalde, ex aliado y actual adversario de Kirchner. Kirchner estuvo ayer en Ituzaingó, en un encuentro con los jefes comunales justicialistas del conurbano, donde ensayó un discurso de fuerte tono peronista. "No tengan ninguna duda de que desde el lugar en que nos toque actuar pondremos en marcha una gran reorganización democrática del movimiento nacional y popular que es el Partido Justicialista, para que todos los afiliados del país y todos los argentinos se puedan expresar", prometió el Presidente. Después confesó que le "preocupa" y que será su prioridad construir desde el peronismo "una herramienta democrática". En el acto no estuvo el radical K y compañero de fórmula de Cristina Kirchner Julio Cobos. Además, el Presidente criticó, aunque sin nombrarlo, a Alberto Rodríguez Saá. "Allí, los que tanto hablan, allí van a tener la urna y vamos a ver quién es quién para recuperar las banderas eternas de Juan Perón y de Eva Perón. Será el pueblo quien defina con claridad ese rumbo", desafió. Momentos antes, también había sumado a sus cuestionamientos a Adolfo Rodríguez Saá, hermano del gobernador puntano y efímero ex presidente: "Hubo otros que hablan por allí mucho de peronismo, pero se animaron a estar una semana y se escaparon a la provincia y nos dejaron el país en llamas sin mirar atrás". Como pocas veces, Kirchner hizo una fuerte defensa del PJ. "Ese peronismo actualizado a los tiempos que nos tocan vivir va a reeditar el sueño frentista, concertador, del líder del movimiento", agregó. Y nombró sólo una vez la construcción de la concertación que arma con el radicalismo. "Desde la concertación plural, con un gran sentido de lo nacional y popular, vamos a reconstruir el país de la justicia y de la dignidad que soñó Eva Perón", apuntó. Después se definió como "peronista" y "militante comprometido con la causa popular". El lunes pasado, Kirchner recibió en la Casa Rosada la visita de cerca de 30 intendentes peronistas del conurbano, los mismos que ayer lo invitaron a Ituzaingó. Quejas por las listas Según pudo saber LA NACION, en ese encuentro de más de una hora los jefes comunales le plantearon al Presidente sus reparos por el armado de las listas a candidatos, en las que los peronistas no tuvieron el protagonismo esperado. Allí también Kirchner les prometió ponerse al frente de la reconstrucción del PJ, según lo reveló después el intendente de La Plata, Julio Alak. Desde que comenzó la campaña, tanto el Presidente como su esposa, la candidata del oficialismo, Cristina Kirchner, apelaron escasamente a la liturgia peronista. De hecho, la semana pasada ambos recordaron el Día de la Lealtad con un acto reducido en una escuela-fábrica de La Tablada, donde no hubo referencias explícitas a Perón. Recién ayer el Presidente les dio a los justicialistas un fuerte respaldo. "Muchas gracias por todo este acompañamiento durante este tiempo. Sin ustedes -dijo, mirando a los intendentes- nada hubiéramos podido hacer." Y agregó, con fuerte tono de voz: "A cada desvelo, a cada problema, a cada situación difícil, siempre aparecieron vuestros compañeros, vuestras banderas, vuestra solidaridad en todo el país y en toda la provincia de Buenos Aires". Antes de terminar, le dedicó un párrafo a Scioli. "Ni hablar de quien me acompañó con absoluta lealtad en la diferencia, porque no somos hipócritas los peronistas, tuvimos acuerdos y diferencias en algún momento con Daniel, pero siempre trabajando para el país y hermanados." También le puso al discurso una humorada. "Decía Cristina hoy cuando le preguntaron si alguna vez discutió con Daniel, y le dijo a un periodista: «Discuto mucho más fuerte con Néstor que con Daniel». Nosotros somos así, somos militantes que decimos las cosas que tenemos que decir, con todas nuestras fuerzas", se despidió. n Además: El legado de Kirchner a su esposa.

Por Mariana Verón De la Redacción de LA NACION

A proposito de la reorganizacion del peronismo.

Hace ya tiempo que se viene hablando, a veces mas o a veces menos, de la necesidad de la reorganizacion del Partido Justicialista. Es que debido a la crisis del 2001 y, más aún, despues de la forma en que la dirigencia pudo resolver la elección de fórmula en el 2003, con el famoso sistema de neolemas que propuso Romero, el PJ quedó en estado de hibernación.

Convengamos primero que el peronismo es antes un movimiento y las formas partidocráticas son débiles en él. No hay cultura institucional interna fuerte debido fundamentalmente a que una porción significativa de la vida política del peronismo se dió en la clandestinidad. Sin poder participar de los procesos elecotorales y con sus dirigentes perseguidos el peronismo participó durante varios años de manera irregular de los procesos eletorales.

Solo despues del retorno de la democracia en el 83 y con una derrota electoral a mano se pudo pensar en la reorganizacion del PJ. Es que para la Renovación Peronista la institucionalización del peronismo solo era posible a traves del voto directo y en consecuencia, de la estructuración del PJ como un aparato territorial que garantizaba la participación de todos sus miembros en elecciones internas previas antes de cada elección general.

Aún con el cimbronazo que significó para Cafiero y la renovación su derrota este proceso continuó. Fundamentalmente los que más profundizaron este camino fueron los partidos justicialistas de los grandes centros urbanos. Esto se debió a la necesidad de la dirigencia de estos distritos de poder ofertar un peronismo democrático, demanda de los sectores medios de la decada del ochenta, que pudiera ser la fuerza política que penetrase en los secotres medios para representarlos. Capital, Cordoba Capital y Rosario comparten varias cosas: Fueron las ciudades donde sale la renovación con más fuerza desplazando a los sectores ortodoxos y vinculados al sindicalismo como parte de esta estrategia en todas estas ciudades el PJ constituyó frentes de centro izquierda y en todos los casos fracasó.

La imposibilidad del acceso al poder local, mas la rutinización democrática cristalizaron los grandes aparatos dedicados mas que a mantener el poder interno que a otra cosa. En este contexto, a las clásicas críticas que tuvo el PJ agregó otra: la del puntero. Producto que en el pasado era de exclusiva factura radical, pasó a ser de los partidos politicos al incorporarse esta figura de manera masiva en el PJ.

Por otro lado, la conduccion de Menem en la presidencia permitió que los diferentes lideres locales provinciales constituyan PJ autónomos del nacional a los efectos de las diferentes conveniencias locales. Es así que este proceso de provincialización del PJ permitió, entre otras cosas la aparicion de la ley de lemas, lo cual permitió ahorrar el proceso electoral interno y trasladarlo a la sociedad. Gran parte de las provincias "chicas" tomaron este modelo organizativo, que resolvió a los gobernadores el problema de la interna partidaria y permitió que todos los sectores puedan particpar sumando sus votos.

Por otro lado, los PJ de los grandes centros urbanos entraron en crisis, debido fundamentalmente al surgimiento de la oposición al menemismo desde el centroizquierda, lo cual descoloca a los PJ. Esta situación mas la cristalización de los aparatos partidarios terminó por pulverizar a los PJ de los grandes centros urbanos. Sus dirigentes, aquellos que lograban evitar el cuestionamiento popular optaron en todos los casos por particpar de las elecciones por "afuera" del PJ, lo cual terminó por vaciarlo y fragmentarlo liquidándolos. Los PJ provinciales por el contrario consolidaron sus poderes locales de tal manera que todas las expresiones opositoras eran fagocitadas por el mismo sistema empleado para resolver la interna peronista. Un fenómeno a parte se dió en las grandes provincias: en todas junto con la consolidación y cristalización de grandes aparatos políticos se produjo la virtual desaparacion del PJ de los grandes conglomerados urbanos salvo el caso del conurbano por razones que veremos mas adelante. El PJ imponía gobernadores con aparatos que se nutrían de votos del gran Mendoza y el sur de la provincia en el caso del PJ mendocino, con los votos del interior provincial en el caso del PJ cordobés que constituyó una alianza con la UCEDE para poder ganar en la capital provincial, con los votos de Santa Fé Capital más la ley de lemas y una alianza con un sector del socialismo para poder dar pelea en Rosario en el caso del PJ de Santa Fe. La Provincia de Buenos Aires cristalizó un aparato en el conurbano, cuyo corazón estaba en la tercer sección electoral, que con el crecimiento de la desocupación y la retirada del estado profundizó su poder político y electoral al punto que en las elecciones del 2001 se llevó prácticamente todo lo que estaba en juego. La circunstancial derrota del 97 a manos de Fernandez Meijide se debió fundamentalmente a que pudo, ni antes ni despues pasó, concentrar todo el voto opositor provincial.

La salida de Menem en el poder "liberó" a todos los PJ, a tal punto que era muy difícil tan solo reurnirlos. Ese proceso derivó en la solución que un gobernador provincial propuso: la ley de neolemas. Es decir trasladar a la sociedad la posibilidad de elegir entre varios peronistas quién será el presidente de la republica. El resto es historia reciente, asi que amigos si lo desean lo dejo para mañana.

La vigencia del peronismo segun Eduardo Fidanza de la consultora poliarquia

La nota que las dejo a continuacion es un articulo de Eduardo Fidanza sobre la vigencia del peronismo. Es importante resaltar que a partir de algunas definiciones del autor, de las cuales me libro de todo comentario por ahora, podemos tener dos conclusiones: la primera, obvia, que el peronismo se encuentra vigente. La segunda que la crisis del sistema de partidos es precisamente la crisis de un sistema que nacio con la UCR alla por el año 1912 con la ñey del sufragio secreto y que despues de la crisis del 2001 parece no tener mas respuestas que una presencia casi total del peronismo en todas sus variantes. Leanlo porque en otra entrada voy a hacer referencia a este articulo. Domingo 21 de Octubre de 2007 Noticias Buscador Nota Opinión El peronismo sobrevive a la desintegración Por Eduardo Fidanza Para LA NACION Alexis de Tocqueville, uno de los autores clásicos de la ciencia política, recomendaba a los historiadores que consideraran en sus explicaciones tanto las causas particulares como las generales. Las elecciones presidenciales de 2007 constituyen una buena oportunidad para aplicar ese precepto. En los modelos actuales de explicación del voto, la identificación partidaria y el factor económico suelen ser las variables que mejor predicen la conducta electoral de los ciudadanos. En ese contexto, se puede considerar la identificación como una causa general y la economía como una causa coyuntural. En los últimos años se ha debatido extensamente la crisis y virtual desaparición de los partidos políticos argentinos. Un solo hecho, que registrará la historia de esta elección presidencial, basta para mostrar el fenómeno: por primera vez en más de 50 años no podrán encontrarse en las mesas de votación las boletas del Partido Justicialista y de la Unión Cívica Radical. Sin embargo, esta realidad no puede oscurecer un hecho significativo, que pertenece al terreno de la cultura: los partidos políticos históricos no son sólo estructuras organizativas, sino también fuentes de identificación en torno a valores, costumbres e idiosincrasias. En este aspecto, el peronismo constituye un fenómeno singular en la política argentina (y mundial): su decadencia como organización no parecería afectar sustancialmente su performance electoral ni cierta identificación con los valores que encarna. Dicho con sencillez: el Partido Justicialista agoniza; el peronismo -aun con otros nombres y líderes- sigue ganando elecciones. Los datos obtenidos por Poliarquía fundamentan esta hipótesis. El 46% de los electores argentinos declara haber votado con cierta regularidad al peronismo a lo largo de su vida y, lo que es más relevante, el 51% reconoce que sus padres tuvieron el mismo comportamiento. A partir aquí es posible inferir dos fenómenos significativos: 1) que la regularidad del voto por el peronismo se basa en la identificación, aun difusa, con sus propuestas, y 2) que ese voto se transmite de generación en generación. Pero hay más: en 2003 un 20% del total de electores declaró que "siempre o casi siempre" votaba al peronismo y que se sentía "cerca o muy cerca" de él. Otro 15% estaba constituido por votantes asiduos, aunque con grados menores de identificación. De allí se infiere que el peronismo cuenta, al menos, con una base electoral segura y permanente en torno al 35%. A partir de ese piso, su caudal fluctúa de acuerdo con las condiciones particulares de cada acto electoral. Son cifras congruentes con la historia electoral de peronismo en elecciones presidenciales de los últimos 25 años, donde osciló entre el 38% en 1999 y el 61%, si se suman las tres candidaturas de 2003. Si las predicciones se cumplen, Cristina Kirchner ganará en primera vuelta con un caudal de entre 45 y 50% de los votos positivos. Ello significa que a la base cautiva y asidua del peronismo sumará la adhesión de entre el 15 y el 20% de electores independientes o de otra filiación política. Rodríguez Saá, a pesar de su reivindicación de la ortodoxia, obtendrá una porción menor de este capital, pues el PJ se atiene a una regla invariable: sólo es fiel al líder de turno. Si a estos datos se les adiciona la indiscutible mejora económica ocurrida en los últimos cuatro años, más la inexistencia de una oposición consolidada, quedarán quizás en evidencia, como quería Tocqueville, las causas generales y particulares que explicarán el apogeo de Cristina dentro de una semana. El autor es sociólogo y director de Poliarquía Consultores