Amigas y amigos: el periodísta psicólogo de Fontevechia le dedicó un reportaje de cuatro páginas a Sergio Acevedo. Las cuales, como corresponde, agregaremos a nuestro pequeño manual se sociología pinguina, el cual sea dicho de paso le recomendamos leer.
Para quienes no sepan quién es Sergio Acevedo daremos lo que llamaremos una sintética Bio.
Es de un pueblo de la zona norte de Santa Cruz llamado Pico Truncado. A los escasos 26 años salió electo Intendente de su pueblo, siendo parte en ese momento de la agrupación de Arturo Puricelli que se llamaba MRP, Movimiento Renovador Peronista. Reelecto intendente, luego diputado nacional cuando Don K es electo gobernador pasa a ocupar un lugar relevante, ya que contrapesaba a otra figura de su misma agrupación: Eduardo Arnold, quién era el vicegobernador. Como verán Don K tenía una suerte de talento natural para manipular a las personas y a los hechos. Bueno, siguiendo con la historia, se transforma en una parte importante de las decisiones junto a Cristina, Zanini y Don Julio. Es querido por Alicia y se transforma en la variante prolija y trasnparente del universo K, es popular y por ese motivo hace una elección considerada histórica por todos en Santa Cruz: obtiene el 78% de los votos, apenas unos puntos menos que los que sacó Don K para la presidencial.
En su camino a la gobernación, supera a Eduardo Arnold, quién peleó por la candidatura hasta el último momento. Le quedó como premió consuelo la diputación. Las malas lenguas hablan de cuestiones de alcoba como el motivo real de la pelea entre Arnold y Acevedo: la mujer del primero fue primero mujer del segundo.
Hecha la reseña, vamos al reportaje. No sé si Fontevechia es un reportero de esos comprometido, pero el 70 % del reportaje se pierde en preguntas tales como, cuando fué la última vez que hablo, quién es mas querido en Santa Cruz, si máximo K es inteligente o un boludo hijo de papi, donde está la planta de Santa Cruz, las prebendas de los amigos del poder como Lázaro, Cristóbal o Rudy y cuánto gana y de dónde sale lo que gana. En fin las tonteras a las que nos tiene acostumbrados el editor de Perfil, pero hubo algunas perlas entre tanta tontera.
Deuda Externa:
—¿Qué lo sorprendió más de Néstor Kirchner en el poder?
—Lo rápido que se sintió presidente. Lo vi en menos de treinta días poner en marcha todo el gobierno, diciendo “Yo soy el presidente, nadie más que yo toma todas las decisiones, acá”.
—¿Lo rápido que se adaptó dice usted?
—Cómo ejerció las funciones y las convicciones. Me acuerdo de la negociación por la deuda. Estábamos en Olivos Alberto Fernández, Zanini, el presidente, Lavagna, Nielsen y Cristina. Vienen del Ministerio de Economía con la propuesta de renegociación de la deuda: la idea era pagar un 85 por ciento. Hacen todo el desarrollo y Kirchner dice que no, “vamos a pagar el 65 por ciento, la Argentina no se tiene que volver a endeudar, esto es más de lo mismo y si no que nos saquen a patadas, pero así tiene que ser”
—¿Lavagna y Nielsen propusieron pagar el 85 por ciento y Kirchner dijo el 65?
—Así es.
La cuestión del petróleo:
—¿Y qué lo sorprendió para mal?
—Que no entendiera que Santa Cruz necesitaba un gobernador.
—¿Fue algo emocional? ¿Su cariño por Santa Cruz le impedía despegarse?
—Había de todo. Pero creo que no tenía derecho a desconfiar de mí. Como presidente, lo que me decepcionó fue esto de regalarle el petróleo a…
—¿Panamerican Energy?
—Sí, y ahora a Repsol YPF.
—¿Tiene expectativa de que con Eskenazi mejore la gerencia de Repsol?
—La verdad, no podría dar una respuesta afirmativa ni negativa.
—Usted conoce a los Ezkenazi del Banco de Santa Cruz. Nadie mejor que los santacruceños para conocer la capacidad de gerencia de los Eskenazi.
—La cuestión petrolera no es lo mismo que la financiera. Yo no puedo decir cómo va a ser la administración petrolera de Repsol YPF, lo que digo es que ha sido pésima por los resultados. Produjeron menos. Usted me pregunta por qué produjeron menos. Porque tenían un sistema de toma de decisiones que era horrible.
—Kirchner asume como presidente y con la privatización que había realizado Menem, el Estado ya había perdido el control del petróleo. ¿Qué debería haber hecho diferente?
—Kirchner y las provincias, porque después de la Constitución, las provincias tuvieron la propiedad de los recursos naturales. Primero, no es necesario tener la operación –que es la gran confusión–, porque uno es el dueño del recurso. Entonces llamo a proyectos de inversión, me dicen qué rentabilidad pretenden; perfecto, lo vemos. Pero ojo: el petróleo es mío. Yo voy a decidir qué hago con la energía, usted invierte y concursamos su taza de ganancia. Pero también definimos una agenda ambiental, una agenda del empleo, de la exploración, de la reinversión...
—¿Usted está más a la izquierda que Kirchner?
—No sé. Pero para mí los recursos naturales son una cuestión central.
—En PERFIL usted dijo que Kirchner priorizó los intereses de las empresas privilegiadas en los ‘90. ¿Sigue pensando lo mismo?
—Sí.
—Dijo que el kirchnerismo es peor que el menemismo. ¿Por qué?
—En que les daba perpetuidad a los yacimientos. El menemismo no se la había dado.
—¿Kirchner es más “entreguistra” que Menem?
—Kirchner tuvo una definición en su momento que fue acertada, dijo que la Argentina lo que necesitaba era una administración. Creo que después de lograr superávit fiscal y de superar el tema del sector externo, la Argentina necesita una estrategia de Nación, de sociedad; y no la tiene.
—Kirchner es un táctico, pero no un estratega.
—Exactamente.
—¿Usted está más a la izquierda que Kirchner?
—No sé. Pero para mí los recursos naturales son una cuestión central.
La Burguesía Provincial
—¿Y es tan importante lo que publica el diario de Rudy Ulloa?
—No lo que publicaba el diario, sino quién lo decía.
—Todos aceptan en Santa Cruz que lo que publica el diario de Rudy Ulloa es la palabra de Kirchner.
—Sin ninguna duda.
—Qué confianza que le tiene Kirchner a Rudy Ulloa. ¿Quién es Rudy Ulloa?
—Es muy amigo de muchos años del presidente (sic). Un militante político de mucho tiempo… que después se hizo empresario.
—¿Gracias a la publicidad oficial?
—Sí, es así. Creo que ese salto empresarial se hace a partir de la publicidad oficial. Pero eso pasa en Chubut, en Tierra del Fuego, en Tucumán… No digo que esté bien, digo que eso es lo que explica un montón de cosas. El descreimiento de la sociedad del sistema republicano, del sistema institucional, de la representitividad política...
—¿Cómo era su relación con los empresarios de la construcción?
—Ni buena ni mala. Teníamos un ente autárquico que era el que hacía los contratos.
—¿Qué incidencia tenía en sus decisiones sobre la obra pública Lázaro Báez?
—No, no era igual que Ulloa. En todas las provincias hay esquemas de licitaciones donde funciona la patria contratista.
—¿Cómo un ex empleado bancario, como Lázaro Báez, se transformó en un millonario empresario de la construcción?
—Me parece que así es como se dan los procesos de formación de los empresarios en la Argentina.
—¿Son todos así?
—No voy a defender lo que no creo que se pueda defender. .
—¿Lázaro Báez es inteligente?
—Lo conozco poco, pero debe ser un tipo inteligente, sí.
—Es una suerte que en Santa Cruz haya tanta gente inteligente, Lázaro Báez, Rudy Ulloa, Máximo Kirchner.
—¿Por qué no le pregunta a ellos?
—Porque no nos atienden.
—Yo no soy fiscal de nadie, lo que digo es que la AFIP tiene que ser responsable de esta situación. Lázaro Báez es contratista de obras nacionales, así que tiene que haber jueces federales, fiscales… Qué quiere que diga…
—¿Cuántas veces habló con Rudy Ulloa?
—Un montón de veces. Lo conozco desde que era militante…
—Con Lázaro Báez también.
—Sí, he hablado con todos. Con el que me pregunte, seguramente he hablado. Creo que le faltaría el respeto a usted y a todos los que van a leer este reportaje si dijera que alguien puede tener un desarrollo empresarial así sin la ayuda del Estado.
—¿Alguna vez le quedó la sospecha de que esa ayuda del Estado a personas como Lázaro Báez o Rudy Ulloa pueda justificarse en que pudieran ser testaferros?
—Ni le voy a responder esa pregunta ni creo que deba responderla.
—¿Usted tiene la íntima convicción de que la cercanía de Báez y Ulloa a Kirchner es simplemente afectiva, ideológica, de militancia, que no hay mezcladas cuestiones económicas?
—No creo que deba responder esa pregunta. Me parece que no es ético. Si yo tuviera alguna presunción, debería ir a la Justicia.
—Pero yo le pregunté por su íntima convicción. Eso no sirve en la justicia argentina que requiere pruebas.
—Creo que cualquier fiscal que quiera investigar en la Argentina, y que se anime, puede hacerlo.
—¿Usted cree que cuando Kirchner deje de tener el poder algunos fiscales se van a animar?
—Yo creo que sí.
—¿Qué es lo que vincula a Kirchner con Cristóbal López?
—López ganó la licitación de los casinos de Santa Cruz cuando Kirchner era gobernador. Era contratista de YPF. Cuando comienza la crisis del crudo, empieza una gran desocupación, y la provincia le exige a YPF y al resto de las operadoras que se hagan cargo. Una de las empresas que tomaba ese personal era la de Cristóbal López. .
—Usted podría dar fe de la hombría de bien de Cristóbal López, si la tuviese.
—No, pero… lo que he visto de Cristóbal López es que es un tipo muy emprendedor, muy trabajador. Si usted me dice que su crecimiento como empresario del juego tiene que ver con su relación con el poder, obviamente...
—¿Usted marca la diferencia entre Cristóbal López y Lázaro Báez?
—No sé en qué momento Lázaro Báez comenzó a desarrollar su actividad. De Cristóbal López sé de los emprendimientos que tiene en Catamarca con el aceite de oliva.. Conozco su casa, obviamente, pero no conozco ninguna de las estancias que tiene en Chubut.
—¿Se refiere a que Cristóbal López era empresario antes de Kirchner mientras que Lázaro Báez y Ulloa no? ¿Y que si Rudy Ulloa no hubiera tenido la publicidad oficial no sería el dueño de ningún medio?
—Exactamente.
—¿Hace alguna autocrítica?
—Soy autocrítico. Pero cuando tuve diferencias, me fui. Cuando tengo diferencias políticas e institucionales, las manifiesto con claridad. Usted me critica este mecanismo de hacer empresarios a los amigos… y yo le digo sí.
—Todas las empresas del país están afectadas por decisiones del Estado, eso es lógico. Pero la devaluación o las retenciones afectan a todas las empresas de un mismo ramo por igual, eso no tiene nada que ver con darle beneficios a algún amigo...
—Es que ésa es una de las tantas maneras que tienen los gobiernos de beneficiar a determinados amigos, determinados sectores…
—Sectores no es lo mismo que personas, si dentro de cada sector, luego hay competencia.
—Yo no puedo asumir la defensa de quien no tengo que asumir ninguna defensa. Ellos deben explicar el porqué de esta situación. Lo que yo puedo explicar es mi vida: vivo de mi trabajo y me cuesta llegar a fin de mes. —
Como verán,me da tela de lo lindo para el Manual de Sociología Pinguina. Pero eso queda para otra oportunidad...